jueves, 17 de septiembre de 2020

Presentación del libro Variaciones en torno a la trayectoria de una hormiga de Angélica Murillo San José, 2010 d.C.

       Esta noche nos reunimos para acercarnos a un libro de poesía que surge del diálogo con la Historia, la filosofía, el mito; esta noche fuimos citados a las siete de la noche en este Centro Cultural para escuchar la poesía de Angélica Murillo y, aunque las siete de la noche en Costa Rica, muy rara vez significa, las siete de la noche, eso hoy tiene menos importancia que nunca, porque, aunque respeto el tiempo de los otros, tanto como el mío, la obra de la que la vamos a hablar hoy, los poemas que escucharemos hoy, no tienen el menor respeto por el tiempo, por lo que significa una hora o un milenio, todo se diluye en un complejo universo de imágenes que juegan con nosotros, del mismo modo, que un niño arma un ejército con granos de frijoles. Somos sólo piezas para que este juego pueda desarrollarse en la pluma de una autora que hoy nace “oficialmente” para las páginas de la literatura costarricense y que, estoy segura, llegará a ocupar un nombre en las páginas de la literatura universal. 
      El dragón, es un personaje mítico, enemigo por antonomasia de los caballeros medievales, uno de los doce animales privilegiados por Buda y preservado en el horóscopo chino, símbolo de poder y fuerza, además ha sido símbolo de la maldad, del mismísimo demonio, de las fuerzas del infierno, pero El Dragón, más que un ser mitológico es una poeta que presenta hoy un libro titulado Variaciones en torno a la trayectoria de una hormiga. 
      Este es un libro que reinventa el mito desde una perspectiva lúdica, el juego de palabras marca la evolución de todas las civilizaciones y es el sello estilístico de esta obra en particular. La poesía, la palabra es el hilo de Ariadna que conduce al lector por las ciudades y los siglos que se muestran, recién nacidos, en estas páginas. La infancia, la muerte, el sueño, el bosque son escenarios recurrentes en estas páginas. 
      Perderse en estos versos es fácil, las palabras plantean personajes y espacios que se deben ver con ojos nuevos, de lo contrario, serían irreconocibles, los espacios y personajes se decostruyen para generar nuevos espacios y personajes, que toman referentes en el inacabado diálogo entre civilizaciones, acá la propia poesía se define como un tránsito, más bien, como la posibilidad de un tránsito y se presenta con rostros y lenguajes diferentes, el lector debe estar atento, de lo contrario confundirá un verso con una nota al pie de página, o soñará que leía un libro que podía conducirlo al laberinto donde el minotauro tenía cuerpo de toro, pero cabeza de dragón y en vez de escupir fuego retaba, como la esfinge, su intelecto. 
      La autora sorprende al lector, no sólo por su estilo fresco y depurado, sino además por su capacidad de hablar de la Historia desde una perspectiva que va más allá de los hechos y las filosofías. Un hablante que parece haber escuchado los hechos de labios de los dioses que cansados de secretos decidieron compartir el fuego. 
    En estas páginas parece que quien custodiaba el Jardín de las Hespérides, decidió abandonar el silencio y empezó a escribir su versión de la Historia. Algunos poemas ofrecen insólitas relaciones entre el sueño y la poesía, la palabra que es capaz de crear una vida, o el sueño de una vida, la palabra que también puede ser una sentencia de muerte o que puede soñarse como una sentencia de muerte, los labios de la pitonisa van revelando lo secretos del oráculo, el oráculo que nos deja sumidos en la terrible certeza de que somos y seremos siempre atletas que en la arena luchan a muerte por la vida, tan solo para divertir a los dioses. Los atletas luchamos a muerte en la arena, porque no hemos entendido, parece que no lo entenderemos, que podemos ser mejores que eso, que la batalla es siempre gratuita cuando su propósito es justificar una vida sobre otra. 
       La hormiga, insecto adorado por los antiguos tesalios es símbolo del trabajo y la previsión, además en India es símbolo de la pequeñez de lo viviente, pero en este libro parecen ser el símbolo de la insignificancia de la humanidad, de lo poco que abarca la vida de un ser humano, de una civilización entera ante la Historia y la cantidad de siglos y hechos que la conforman. El amor entre hermanos, el deseo por el conocimiento, los ritos que algunas religiones realizan simbólicamente para obtener comunión con su dios se plantean más allá de lo simbólico, se convierten en un hecho más de las civilizaciones conocidas, el cáliz humano que permite, en este caso, acceder al conocimiento ancestral y primigenio, estos ritos que se experimentan para dar un sentido a la propia existencia y un valor sagrado al instinto, al deseo que mueve las acciones 
      Los poemas tienden a ser cosmogónicos y desafiantes, cada espacio y cada era se recrean desde la cotidianidad y el juego, la metáfora de la niña que encuentra un manojo de viejas fotografías y que no puede saber, a ciencia cierta, qué personajes tiene ante sus ojos, parece aplicarse a toda la historia, pues si bien, se pueden generar hipótesis y recrear condiciones, la verdad sobre cómo fueron los antecesores, es siempre vaga, imprecisa, como el recuerdo, incluso, de la propia infancia. Este poemario es una invitación a repensar la vida y las palabras. 
     El libro es un diálogo entre la ciencia y el mito, el silencio y la palabra, la filosofía y la poesía, la historia y el relato, el sueño y la vigilia. Esta es una obra que cautiva y reta al lector desde el principio, un texto donde el tabú deja de ser, esta es una poesía ante la que hay que mantener una actitud lúcida, no es una danza, es más bien una partida de ajedrez ante un adversario que logra siempre el jaque. Lo que pueda decir sobre este libro será siempre insignificante frente a la magnitud de estos poemas que dan cuenta de una autora madura, con un amplio bagaje que se muestra sólida y capaz de dialogar con los poetas universales que han contribuido a la evolución de esta rama de la literatura que ha generado tan célebres y diversos tomos a los que hoy se suma esta producción, que tuve el honor de presentar ante ustedes.